[ESDLA] Las Dos Torres

El 18 de Diciembre de 2002 se estrenó la que es probablemente la más vilipendiada de las tres películas, por cometer el “delito” de ser la que más se separa del texto de Tolkien. Voy a arriesgarme a confesar que me gustó incluso un poco más que “La Comunidad del Anillo”, pues para gustos se hicieron los colores (aunque recuerdo que un amigo salió despotricando del cine y después se compró el DVD, así que a lo mejor hay algunos que tienen que confesar más que yo…). Por supuesto, se trata de un debate legítimo y perfectamente justificable, pero tampoco faltó lugar para otra polémica de mucho menor eco y mucha mayor estupidez, ya que se alzaron algunas voces que exigían que se cambiase el título de la película para no herir la sensibilidad norteamericana tras los atentados terroristas del 11-S (¡chúpate esa!).

Para mí, estamos hablando de la película que posee el mejor comienzo de las tres. Empieza con un ritmo tranquilo, acunado por la suave melodía de Howard Shore, mientras en la pantalla se recorre el precioso paisaje de las Montañas Nubladas y en la lejanía se escuchan las palabras de Gandalf, inmerso en su duelo con el Balrog. Con un cambio de ritmo sorprendente, atravesamos la pared de roca y volvemos al puente de Khazad-Dum, donde en esta ocasión seguimos a Gandalf en su caída y descubrimos que su lucha con el Balrog continúa.




Enseguida se nos insinúa que todo ha sido un sueño de Frodo, aunque los que hemos leído el libro sabemos que no es así. En apenas unos instantes conoceremos a Gollum/Sméagol, que se une a Frodo y a Sam. Rápidamente situaremos a Pippin y a Merry, presos de los Uruk-Hai, que los conducen camino de Isengard, siendo perseguidos por Aragorn, Legolas y Gimli.

Resumiendo: en apenas 10 ó 15 minutos hemos conseguido situar a todos los personajes que dejamos tirados un año antes, enganchando perfectamente con la película anterior, algo que no es nada fácil. Lógicamente, la gente que no haya visto “La Comunidad del Anillo” no entenderá mucho.

Hagamos ahora una relación de los nuevos actores que aparecerán por primera vez en esta peli:

• Andy Serkis (Gollum/Sméagol): Gollum es sin duda la mayor sorpresa de esta película y el orgullo de los miembros del departamento de efectos visuales. Para los que no lo sepáis, Andy Serkis no sólo presta su voz al personaje, sino que rodó las escenas con un traje de captura de movimiento, de modo que todos los movimientos de Gollum son reales, aunque están sometidos a lo que podemos denominar “maquillaje informático”. La expresividad de su rostro y un esmeradísimo cuidado del juego de luces y sombras consiguen que por momentos nos olvidemos de que Gollum es digital.



• Bernard Hill (Théoden): algunos reconoceréis en este hombre al capitán Smith que comandaba el “Titanic” de James Cameron. Entró en el proyecto como uno de los candidatos al papel de Gandalf, pero cuando éste fue adjudicado a Ian McKellen, Peter Jackson no se resignó a prescindir de él, ofreciéndole el papel del rey Théoden de Rohan, que interpreta muy convincentemente.





• Miranda Otto (Éowyn): el otro personaje femenino de la novela, que se enamorará platónicamente de Aragorn, está interpretado por una actriz hasta ahora desconocida. Aunque creo que su simbiosis con el papel en general es buena, en algunos momentos ofrece una imagen más frágil que en el libro, y, al contrario de lo que sucede con el personaje de Aragorn, en este caso no me convence demasiado. De todos modos, puede valer (si es que a veces me gusta darle muchas vueltas a las cosas).



• Karl Urban (Éomer): otro actor totalmente desconocido, un tipo tan enorme que hay que mirar durante varios días para verlo del todo. Su papel se ha visto muy recortado respecto al Éomer del libro, lo que sorprendentemente no ha suscitado ningún tipo de polémica entre los fans.



• David Wenham (Faramir): el hermano menor de Boromir, cuyas transformaciones respecto del libro han originado gran controversia entre los seguidores. Trataré ese tema más tarde.



• Brad Dourif (Gríma/Lengua de Serpiente): este actor es especialista en personajes retorcidos, desde su debut como joven perturbado en “Alguien voló sobre el nido del cuco” hasta este Lengua de Serpiente, pasando por el asesino en serie de “El Exorcista III” o Chucky, el “Muñeco Diabólico”. Me parece una elección adecuada para el papel.



• John Rhys-Davies (Bárbol): bueno, este es nuevo pero no es nuevo. El mismo señor que hace de Gimli presta su voz al líder de los Ents. Buen trabajo del equipo de efectos visuales, tanto con Bárbol como con el resto de Ents.

Volvamos a la historia de la película. Para los que no hayáis leído el libro, se divide en dos partes: la segunda se dedica exclusivamente a Frodo y Sam, y la primera al resto de los personajes. Obviamente, el resultado de trasladar esta distribución de la acción a la película sería catastrófico, por lo que se decide linealizar la historia e ir otorgando el centro de atención casi casi por turno. En mi opinión, este montaje basado en rotaciones se hace de manera bastante equitativa y ágil, manteniendo el ritmo apropiado para la película.

Cabe hablar también de una serie de cambios sustanciales respecto a la novela, cuyo objetivo es el de siempre, simplificar la trama (generalmente eliminando personajes del libro) y/o aumentar el ritmo de la película:

• El destierro de Éomer: como he mencionado antes, su papel se ha visto muy reducido en la traslación a la gran pantalla. Para quitar personajes, Éomer desaparece de Rohan y de la Batalla del Abismo de Helm, quedando su aparición reducida casi a un simple cameo.



• El “exorcismo” de Théoden: mucho más espectacular que en el libro, con duelo entre Gandalf y Saruman y un excelente maquillaje para el decrépito Théoden. No me convence mucho el asunto ese de que Aragorn, Legolas y Gimli le peguen una paliza a los sicarios de Gríma, aunque tampoco me molesta.



• Arwen y Elrond en Rivendel: el objetivo de esta escena es implicar un poco a los elfos en la historia y retomar la relación entre Aragorn y Arwen. Contemplamos las dudas de ambos en torno a la decisión que han de tomar, morir juntos o separarse para siempre. Sigo diciendo que, para mí, estas escenas otorgan una mayor verosimilitud y humanidad a los dos personajes, aumentando el dramatismo y la incertidumbre de la crucial decisión (sólo para los no lectores, ya que en el libro está tomada de antemano).



• La decisión de Faramir: en el libro, Faramir rechaza el anillo voluntariamente, sin apenas esfuerzo ni dudas. Sin embargo, en la película pretende llevarlo a Minas Tirith en un primer momento, para retractarse tan sólo después de ver el efecto que está teniendo sobre Frodo. Acosado por los fans, Peter Jackson se ha hartado de justificarse, aduciendo que si bien en el libro puede que no se note tanto, en la película no puede meter a un personaje que renuncie fácilmente al anillo, porque le quitaría todo el poder que ha demostrado anteriormente. Yo creo que tiene toda la razón. Además, un flashback de Faramir incluído en la versión extendida ayuda al espectador a comprender mejor sus motivos.



• El ataque de los wargos: dosis de acción a mitad de la película. Acelera un poco el ritmo de la película, que se había ralentizado; nos enseña la chulería élfica de Legolas subiendo al caballo de una manera totalmente imposible; y simula la muerte de Aragorn. Estoy convencido de que lo que se persigue con esto último no es engañar al espectador (me parecería un intento demasiado burdo), sino a Éowyn, y preparar el terreno para la escena en que Legolas le devuelve el colgante de Arwen a Aragorn (es en esta escena cuando Éowyn empieza a comprender que Aragorn nunca será suyo).



• La llegada de los elfos: me encanta esta escena porque consigue el efecto que se pretende. Sabemos que los Rohirrim se encuentran en una tremenda inferioridad, pero la llegada de los guerreros elfos les otorga una ínfima posibilidad de vencer, con lo que se despierta el ánimo de los jinetes (y del público) antes de la batalla.



• La Batalla del Abismo de Helm: en el libro ocupa apenas un par de capítulos, así que requiere prácticamente una reescritura completa antes de ser rodada. La arenga de Aragorn a los elfos (en su propio idioma), la llegada de los orcos a las murallas, las descargas de flechas, las escalas, la explosión del muro, la lucha cuerpo a cuerpo, la carga desesperada al amanecer, la llegada de Gandalf con Éomer (posiblemente la escena más intensa de la película, junto a la caída de Gandalf en Moria),… Una de las mejores secuencias de acción de los últimos años. Me río yo de la persecución en la autopista de “Matrix Reloaded” (toma dardito).







• La destrucción de Isengard: esta escena no aparece en el libro, pero en la película es imperativo que figure. Es una escena breve pero emocionante, que refleja uno de los sueños de Tolkien: la victoria de la Naturaleza sobre la Industria. Aunque los efectos visuales no gozan de la calidad alcanzada en otras escenas (debido a la falta de tiempo), son aceptables.

Escenas que son, pero no están:

• La Voz de Saruman: la primera parte del libro finaliza con una visita a Saruman. La idea inicial era trasladar esta escena al principio de “El Retorno del Rey”, ya que se consideró que el fin de la batalla era el momento perfecto para acabar la película y marcharnos todos a casa. Podría haber sido un excelente prólogo pero, para no alargar un metraje ya de por sí muy extenso, finalmente quedó relegada a la versión extendida de la misma. Yo habría preferido conservarla, ya que el hilo argumental de Saruman me parece lo suficientemente importante como para ello. Supongo que se debe a que he leído el libro. De todos modos, ya antes del estreno se anunció que aparecería en la versión extendida, así que simplemente esperaríamos un año más.





• El antro de Ella-Laraña: este es un capítulo del final de “Las Dos Torres”, que fue trasladado a la tercera película para no incurrir en anacronismos, ya que sucede al mismo tiempo que la Batalla de los Campos del Pelennor.

En resumen, tenemos una película que se ha despegado bastante del texto original, aunque siempre con buenas intenciones (al menos eso entiendo yo) y sin desvirtuar el espíritu de la obra de Tolkien. Si en “La Comunidad del Anillo” el protagonista absoluto era Gandalf (cuya presencia aquí es casi tan reducida como la de Éomer), en “Las Dos Torres” ese protagonismo se traslada a Aragorn, aunque creo que al final Gollum consigue robárselo, pues no en vano es la sorpresa de la película. También podemos observar cómo las dudas de Aragorn resurgen en algún momento, especialmente en el viaje hacia el Abismo de Helm (cuando contempla a Éowyn como si estuviese considerando la posibilidad de dejar marchar a Arwen) y en los flashbacks con Arwen. Sin embargo, su confianza va aumentando hasta llegar al clímax final, cuando lanza la desesperada última carga de los Rohirrim sabiendo que Gandalf no le va a fallar.

Reconozco que Gimli como secundario cómico no me acaba de encajar, y que algunas escenas son un poco (bastante) macarras, pero yo entré al cine y me lo pasé bomba durante tres horas. Y no olvidemos que estamos hablando de una película sin principio ni final, lo que para mí la convierte en la más difícil de rodar de las tres. Por otra parte, el equipo de producción se vio obligado a emplear mucho tiempo en la promoción de “La Comunidad del Anillo”, de modo que sólo se pudo dedicar en cuerpo y alma a “Las Dos Torres” después de la ceremonia de los Oscars de finales de marzo de 2002. Por este motivo se trabajó contrarreloj y con el agua al cuello, entregándose la cinta al estudio prácticamente en la fecha límite (recordad mi comentario acerca de la calidad de los efectos visuales en la destrucción de Isengard, que no pudieron ser mejores por falta de tiempo). Una vez que la trilogía estaba lanzada, Peter Jackson decidió que ya no era necesario tentar a la suerte y sacrificó mucha de la labor de promoción de “Las Dos Torres”, dedicándole mucho menos tiempo que a la primera película, para concentrarse en “El Retorno del Rey”, que de las tres entregas es claramente la que cuenta con una postproducción más exigente.

En el apartado técnico (fotografía, dirección artística, vestuario, música, etc) se mantiene el nivel de la primera película, si es que no se supera por momentos. Me gustó muchísimo la banda sonora de Howard Shore, que incluye poco material de “La Comunidad del Anillo” (algo sí que se ha conservado, para mantener la coherencia de la historia) y que se vio excluida de la pelea por el Oscar debido a una absurda norma aprobada expresamente con este objetivo y que para mayor despropósito fue anulada al año siguiente, donde Shore conseguiría su segundo premio.

La versión extendida

En esta ocasión son unos 43 minutos aproximadamente los que se añaden a la película estrenada en cines. Si bien en la primera película no aportaban nada esencial, aquí cobran bastante más importancia, ya que contribuyen a dar un mayor desarrollo a los personajes secundarios (Éomer, Faramir, Éowyn, Gríma, etc). Nuevamente se combinan escenas nuevas con escenas prolongadas, y sucesos del libro (la pócima de los Ents, los Vados del Isen, la muerte de Théodred, la visión de Faramir, los Ucornos en el Abismo de Helm…) con ideas originales del equipo de guionistas (el funeral de Théodred, los recuerdos de Faramir, Saruman deduciendo la verdadera identidad de Aragorn…).

Mención especial merece el flashback en el que Faramir recuerda la reconquista de Osgiliath dirigida por Boromir. Aquí se introduce el personaje de Denethor, y en vista de lo acontecido acabamos por comprender mejor el cambio experimentado por Faramir respecto del libro. Para que os hagáis una idea de su calidad, esta escena podría encajar perfectamente en “La Comunidad del Anillo”, para explicar la llegada de Boromir a Rivendel.

También me gusta bastante el funeral de Théodred, una escena emotiva con un final un tanto brusco que no me acaba de agradar. Además descubrimos que los Uruk-Hai que huyen del Abismo de Helm no consiguen llegar muy lejos, ya que los Ucornos les cortan la retirada. Y para los espectadores que no han leído el libro, Faramir anticipa la trampa a la que Gollum conduce a Frodo, mientras les guía a través de las alcantarillas de Osgiliath para que puedan escapar de la ciudad.

Resumiendo, se atan algunos cabos que quedaban sueltos en la versión cinematográfica, apaciguando un poco las iras de algunos fans acérrimos. Un amigo mío del colectivo purista (ese que al principio os dije que acabó comprándose el DVD) abominaba de la versión cinematográfica y dejó de hacerle vudú a Peter Jackson después de ver esta versión extendida. Por lo tanto, le concedo mayor importancia de la que di a la versión extendida de “La Comunidad del Anillo” y os recomiendo encarecidamente que la veáis, especialmente aquellos de vosotros a los que la versión estrenada en cines no os gustó.

© Zineman

Última entrega: El Retorno del Rey (20 Diciembre)