[LGDLG] Episodio III: La Venganza de los Sith
Llega hoy a su conclusión este especial de “La Guerra de las Galaxias”, con el Episodio III, “La Venganza de los Sith”, cuyo estreno mundial tuvo lugar el pasado día 19.
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En las últimas semanas, el ambiente me recordaba mucho al que se respiraba cuando estaba a punto de estrenarse “Matrix Revolutions”. Parece que mucha gente esperaba la explicación de todos los hechos que se han venido produciendo a lo largo de la nueva trilogía, cuando en realidad era fácil prever que se atarían los cabos principales (que por otra parte ya conocíamos de sobra, gracias a la “trilogía clásica”) y los sucesos de importancia menor quedarían como estaban (por ejemplo, el misterio de los archivos Jedi borrados, o la historia del maestro Sifo Dyas). Tampoco creo que estos pequeños cabos sueltos tengan la más mínima importancia, porque el Episodio III es una película de acción, con una trama bastante sencilla que se compone fundamentalmente de duelos y batallas, con un impresionante despliegue de efectos especiales. Para que os hagáis una idea, os diré que la fotografía principal terminó en septiembre del año 2003, y entonces se inició un proceso de postproducción de 18 meses.
La película se abre con una espectacular secuencia en la que enseguida aparecen los cazas de Obi-Wan Kenobi y Anakin Skywalker, que entran en el campo de batalla tras rebasar un destructor de la República. A partir de este momento se suceden escenas de acción casi continua a lo largo de las aproximadamente dos horas y cuarto que dura la película. Vamos saltando de duelo en duelo: los dos Jedis contra el Conde Dooku, Obi-Wan contra el General Grievous, Palpatine contra Mace Windu y otros tres Jedis, Palpatine contra Yoda... Y el duelo estrella: Anakin contra Obi-Wan. Para mí, el gran acierto de Lucas en este Episodio III ha sido el ritmo endiablado que le ha dado a la historia, combinando el estilo de “La Amenaza Fantasma” con el despliegue de medios del final de “El Ataque de los Clones”. Ya que no podíamos esperar muchas sorpresas (el argumento era esclavo de las cinco películas anteriores), se recurre a la acción pura y dura.
Por supuesto, esto no impide que la película tenga sus fallos, sobre todo en los aspectos no relacionados con la acción. Las escenas románticas entre Anakin y Padmé son bastante mediocres y están metidas con calzador (de hecho, los minutos que Natalie Portman tiene en pantalla son bastante escasos). Hayden Christensen me sigue pareciendo bastante flojo como Anakin, y Obi-Wan Kenobi me ha causado bastante mejor impresión que en el Episodio II, pero sigue sin parecerme tan poderoso como cabía esperar de un Maestro Jedi (y además miembro del Consejo). No me convence tampoco el hecho de que Anakin cambie casi instantáneamente de bando (ahora soy bueno, ¡clic!, ahora soy malo y además pongo voz de machote), sino que esperaba que Palpatine tuviera que currárselo un poco más. Ese tipo de escenas exigen un ritmo más pausado y un desarrollo más elaborado, y por esta razón Lucas patina en gran parte de las secuencias más dramáticas. Para terminar, el General Grievous me parece un villano mediocre, sobre todo por esa incesante tos que le han puesto durante sus primeros minutos en pantalla, y que sólo sirve para eliminar el poco miedo que podría dar. ¿Alguien se imagina a Darth Vader tosiendo?
Sin embargo, también hay escenas que no son de acción y me han gustado mucho: el ataque al Templo Jedi; la ejecución de la Orden 66 por parte de las tropas clon; el tramo final en el que se alternan planos de Padmé y Anakin, cada uno en una mesa de operaciones, la primera para dar a luz a Luke y a Leia, y el segundo para su transformación en Darth Vader. El duelo entre Anakin y Obi-Wan no está mal, pero creo que se le podría haber exigido más. Y hablando de finales, al final de la película no falta el guiño al Episodio IV, con la tan cacareada “escena Harry Potter”, en la que Obi-Wan deja al bebé Luke con sus tíos en Tatooine, emulando aquella secuencia de hace 28 años en la que el joven Luke observa el atardecer de los dos soles. Esta escena continúa con la tónica de las cinco películas anteriores: todas las películas de la saga se cierran con una secuencia sin diálogo, en la que sólo se escucha una pieza musical.
En el post del Episodio II incluí el pasado día 19 un par de críticas diametralmente opuestas. Una de ellas elevaba a Lucas a los altares, y la otra era absolutamente masacrante. Yo me esperaba algo a medio camino entre ambas, y creo que he acertado. “La Venganza de los Sith” es una buena película de acción (la mejor de la nueva trilogía) con un prodigioso despliegue de efectos especiales, marca de la casa Lucas. Pero me sigo quedando con la “trilogía clásica”.
Como dice el eslogan del Episodio III, “la saga está completa”.
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O quizás no…
¿El final de una saga?
En la crítica del Episodio II, al principio del avance del Episodio III, comentaba que éste supondría el final de la saga, pero añadía prudentemente el adjetivo “cinematográfica”. Hoy explicaré por qué. George Lucas ha reiterado varias veces su renuncia a rodar una tercera trilogía (Episodios VII, VIII y IX). Sin embargo, aún no ha cerrado completamente la puerta del universo de “La Guerra de las Galaxias”.
Hace unos meses surgió el rumor de que se estaba preparando una serie de televisión de “La Guerra de las Galaxias”, del mismo estilo que “El Joven Indiana Jones”. Lucas no ha confirmado todavía la puesta en marcha del proyecto, aunque sí ha reconocido que se está estudiando la posibilidad porque “es la única manera de que la saga continúe”. Vamos, que todo hace suponer que el hombre ya está calculando los pingües beneficios que le puede reportar el asunto, por lo que no sería extraño que dentro de algún tiempo “La Guerra de las Galaxias” llegara a la pequeña pantalla. Algún ejecutivo de Lucasfilm se ha atrevido a afirmar que ya hay varios guiones escritos, todos ellos con la etiqueta TOP SECRET, pero no se ha fijado ninguna fecha concreta. En todo caso, como he dicho antes, estaríamos hablando de un proyecto a medio o largo plazo.
Lo que sí parece más sólido es la existencia de un contrato con Hasbro (la compañía juguetera que tiene la exclusiva de producción del merchandising de la saga) para una nueva línea de juguetes de “La Guerra de las Galaxias”. Algunos empleados de la compañía han comentado que se trata de personajes completamente nuevos, a juzgar por sus nombres y su apariencia (todos son bastante jóvenes). Dentro de la empresa se ha llegado a especular con la posibilidad de que pertenezcan a la hipotética serie de televisión, y que en ella incluso podría aparecer esporádicamente Luke Skywalker.
La rumorología está completamente desatada. Parece ser que Lucas produciría la serie, pero no la dirigiría. En cuanto a la trama, los rumores pueden clasificarse en dos grupos: los que recuperan pasajes perdidos de la saga cinematográfica y los que apuestan por continuar la historia después de “El Retorno del Jedi”, con Luke instruyendo a nuevos Caballeros Jedi. En ninguno de ambos supuestos tiene pinta de que vaya a aparecer Darth Vader, pero quién sabe…
Por supuesto, hay otras noticias que sí cuentan con una confirmación oficial. Lucas ha anunciado el reestreno de las seis películas de la saga en formato 3D (este hombre ya no sabe qué hacer para ganar dinero; en este plan, hasta puede que se retracte y ruede la tercera trilogía). La idea inicial es reestrenar a partir de 2007, a razón de una película por año y siguiendo la historia en orden cronológico (es decir, en 2007 podremos ver “La Amenaza Fantasma”, y para ver “El Retorno del Jedi” tendremos que esperar hasta 2012). Aunque no está confirmado, es probable que en estos reestrenos se incluya metraje inédito, además de ciertos retoques digitales.
También existe una serie de dibujos animados, “Star Wars: Las Guerras Clon”, que se sitúa cronológicamente entre los Episodios II y III, y relata los hechos acaecidos durante la guerra. Fue estrenada en televisión en 2003, y ganó un Premio Emmy en 2004. Claro que sólo había dos nominados y el otro era “Las Supernenas”, cuyo director es casualmente el mismo de “Star Wars: Las Guerras Clon”, Genndy Tartakovsky (sí, es ruso).
Y dejando el mundo del cine y la tele aparte, tenemos toneladas de novelas (ambientadas antes, durante y después de la saga cinematográfica), cómics, juegos de rol, videojuegos, juguetes, etc. Sólo nos falta el parque temático, y no lo digo muy alto por si acaso le doy ideas a Lucas.
Seguro que todos nos estaremos preguntando lo mismo: ¿Habrá un final para esta saga?
© Zineman
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En las últimas semanas, el ambiente me recordaba mucho al que se respiraba cuando estaba a punto de estrenarse “Matrix Revolutions”. Parece que mucha gente esperaba la explicación de todos los hechos que se han venido produciendo a lo largo de la nueva trilogía, cuando en realidad era fácil prever que se atarían los cabos principales (que por otra parte ya conocíamos de sobra, gracias a la “trilogía clásica”) y los sucesos de importancia menor quedarían como estaban (por ejemplo, el misterio de los archivos Jedi borrados, o la historia del maestro Sifo Dyas). Tampoco creo que estos pequeños cabos sueltos tengan la más mínima importancia, porque el Episodio III es una película de acción, con una trama bastante sencilla que se compone fundamentalmente de duelos y batallas, con un impresionante despliegue de efectos especiales. Para que os hagáis una idea, os diré que la fotografía principal terminó en septiembre del año 2003, y entonces se inició un proceso de postproducción de 18 meses.
La película se abre con una espectacular secuencia en la que enseguida aparecen los cazas de Obi-Wan Kenobi y Anakin Skywalker, que entran en el campo de batalla tras rebasar un destructor de la República. A partir de este momento se suceden escenas de acción casi continua a lo largo de las aproximadamente dos horas y cuarto que dura la película. Vamos saltando de duelo en duelo: los dos Jedis contra el Conde Dooku, Obi-Wan contra el General Grievous, Palpatine contra Mace Windu y otros tres Jedis, Palpatine contra Yoda... Y el duelo estrella: Anakin contra Obi-Wan. Para mí, el gran acierto de Lucas en este Episodio III ha sido el ritmo endiablado que le ha dado a la historia, combinando el estilo de “La Amenaza Fantasma” con el despliegue de medios del final de “El Ataque de los Clones”. Ya que no podíamos esperar muchas sorpresas (el argumento era esclavo de las cinco películas anteriores), se recurre a la acción pura y dura.
Por supuesto, esto no impide que la película tenga sus fallos, sobre todo en los aspectos no relacionados con la acción. Las escenas románticas entre Anakin y Padmé son bastante mediocres y están metidas con calzador (de hecho, los minutos que Natalie Portman tiene en pantalla son bastante escasos). Hayden Christensen me sigue pareciendo bastante flojo como Anakin, y Obi-Wan Kenobi me ha causado bastante mejor impresión que en el Episodio II, pero sigue sin parecerme tan poderoso como cabía esperar de un Maestro Jedi (y además miembro del Consejo). No me convence tampoco el hecho de que Anakin cambie casi instantáneamente de bando (ahora soy bueno, ¡clic!, ahora soy malo y además pongo voz de machote), sino que esperaba que Palpatine tuviera que currárselo un poco más. Ese tipo de escenas exigen un ritmo más pausado y un desarrollo más elaborado, y por esta razón Lucas patina en gran parte de las secuencias más dramáticas. Para terminar, el General Grievous me parece un villano mediocre, sobre todo por esa incesante tos que le han puesto durante sus primeros minutos en pantalla, y que sólo sirve para eliminar el poco miedo que podría dar. ¿Alguien se imagina a Darth Vader tosiendo?
Sin embargo, también hay escenas que no son de acción y me han gustado mucho: el ataque al Templo Jedi; la ejecución de la Orden 66 por parte de las tropas clon; el tramo final en el que se alternan planos de Padmé y Anakin, cada uno en una mesa de operaciones, la primera para dar a luz a Luke y a Leia, y el segundo para su transformación en Darth Vader. El duelo entre Anakin y Obi-Wan no está mal, pero creo que se le podría haber exigido más. Y hablando de finales, al final de la película no falta el guiño al Episodio IV, con la tan cacareada “escena Harry Potter”, en la que Obi-Wan deja al bebé Luke con sus tíos en Tatooine, emulando aquella secuencia de hace 28 años en la que el joven Luke observa el atardecer de los dos soles. Esta escena continúa con la tónica de las cinco películas anteriores: todas las películas de la saga se cierran con una secuencia sin diálogo, en la que sólo se escucha una pieza musical.
En el post del Episodio II incluí el pasado día 19 un par de críticas diametralmente opuestas. Una de ellas elevaba a Lucas a los altares, y la otra era absolutamente masacrante. Yo me esperaba algo a medio camino entre ambas, y creo que he acertado. “La Venganza de los Sith” es una buena película de acción (la mejor de la nueva trilogía) con un prodigioso despliegue de efectos especiales, marca de la casa Lucas. Pero me sigo quedando con la “trilogía clásica”.
Como dice el eslogan del Episodio III, “la saga está completa”.
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O quizás no…
¿El final de una saga?
En la crítica del Episodio II, al principio del avance del Episodio III, comentaba que éste supondría el final de la saga, pero añadía prudentemente el adjetivo “cinematográfica”. Hoy explicaré por qué. George Lucas ha reiterado varias veces su renuncia a rodar una tercera trilogía (Episodios VII, VIII y IX). Sin embargo, aún no ha cerrado completamente la puerta del universo de “La Guerra de las Galaxias”.
Hace unos meses surgió el rumor de que se estaba preparando una serie de televisión de “La Guerra de las Galaxias”, del mismo estilo que “El Joven Indiana Jones”. Lucas no ha confirmado todavía la puesta en marcha del proyecto, aunque sí ha reconocido que se está estudiando la posibilidad porque “es la única manera de que la saga continúe”. Vamos, que todo hace suponer que el hombre ya está calculando los pingües beneficios que le puede reportar el asunto, por lo que no sería extraño que dentro de algún tiempo “La Guerra de las Galaxias” llegara a la pequeña pantalla. Algún ejecutivo de Lucasfilm se ha atrevido a afirmar que ya hay varios guiones escritos, todos ellos con la etiqueta TOP SECRET, pero no se ha fijado ninguna fecha concreta. En todo caso, como he dicho antes, estaríamos hablando de un proyecto a medio o largo plazo.
Lo que sí parece más sólido es la existencia de un contrato con Hasbro (la compañía juguetera que tiene la exclusiva de producción del merchandising de la saga) para una nueva línea de juguetes de “La Guerra de las Galaxias”. Algunos empleados de la compañía han comentado que se trata de personajes completamente nuevos, a juzgar por sus nombres y su apariencia (todos son bastante jóvenes). Dentro de la empresa se ha llegado a especular con la posibilidad de que pertenezcan a la hipotética serie de televisión, y que en ella incluso podría aparecer esporádicamente Luke Skywalker.
La rumorología está completamente desatada. Parece ser que Lucas produciría la serie, pero no la dirigiría. En cuanto a la trama, los rumores pueden clasificarse en dos grupos: los que recuperan pasajes perdidos de la saga cinematográfica y los que apuestan por continuar la historia después de “El Retorno del Jedi”, con Luke instruyendo a nuevos Caballeros Jedi. En ninguno de ambos supuestos tiene pinta de que vaya a aparecer Darth Vader, pero quién sabe…
Por supuesto, hay otras noticias que sí cuentan con una confirmación oficial. Lucas ha anunciado el reestreno de las seis películas de la saga en formato 3D (este hombre ya no sabe qué hacer para ganar dinero; en este plan, hasta puede que se retracte y ruede la tercera trilogía). La idea inicial es reestrenar a partir de 2007, a razón de una película por año y siguiendo la historia en orden cronológico (es decir, en 2007 podremos ver “La Amenaza Fantasma”, y para ver “El Retorno del Jedi” tendremos que esperar hasta 2012). Aunque no está confirmado, es probable que en estos reestrenos se incluya metraje inédito, además de ciertos retoques digitales.
También existe una serie de dibujos animados, “Star Wars: Las Guerras Clon”, que se sitúa cronológicamente entre los Episodios II y III, y relata los hechos acaecidos durante la guerra. Fue estrenada en televisión en 2003, y ganó un Premio Emmy en 2004. Claro que sólo había dos nominados y el otro era “Las Supernenas”, cuyo director es casualmente el mismo de “Star Wars: Las Guerras Clon”, Genndy Tartakovsky (sí, es ruso).
Y dejando el mundo del cine y la tele aparte, tenemos toneladas de novelas (ambientadas antes, durante y después de la saga cinematográfica), cómics, juegos de rol, videojuegos, juguetes, etc. Sólo nos falta el parque temático, y no lo digo muy alto por si acaso le doy ideas a Lucas.
Seguro que todos nos estaremos preguntando lo mismo: ¿Habrá un final para esta saga?
© Zineman
Etiquetas: Cine
2 Comentarios:
Bueno, gran parte de la culpa de que Hayden Christensen no me guste la tiene su doblaje una vez que se ha pasado al Lado Oscuro (la forma en que dice la frase "¿Te lo impide Obi-Wan?" es el mejor ejemplo). El doblaje del Emperador también es bastante malo, con esas frases alargadas en plan "toooooooooodos los jeeeeeeeeeeeediiiiiiisooooonennnnnneeeeeemiiiiiiigos". A lo mejor es que los Sith no saben hablar...
Del tema de los Jedis que desaparecen circulaba una teoría, según la cual los Jedis que aceptan la llegada de la muerte "mantienen su identidad", al contrario de lo que sucede con los que mueren en combate. Antes del Episodio III podía ser cierta, debido a los casos de Obi-Wan y Yoda, pero el final de la película la desmonta completamente, cuando Yoda menciona a Qui-Gon. De todos modos, en el guión original del Episodio II había una aparición "fantasmal" de Qui-Gon, pero esta escena tuvo que ser eliminada por un grave accidente de moto de Liam Neeson. Así que nos quedamos como estábamos.
Por cierto, Vidball, vaya horas que escoges para postear, ¿no? :p
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