[Cine] Sin City
Hoy nos vamos de preestreno y hablamos de “Sin City”, que llega a los cines el viernes que viene.
En 1992, un joven tejano de 24 años llamado Robert Rodríguez dirigía “El Mariachi”, una película con el “ambicioso” presupuesto de 7.000 dólares. La cinta se convirtió en un éxito rotundo, con dos millones de dólares de recaudación (vale, en términos absolutos no es gran cosa, pero en términos relativos es casi 300 veces lo que se invirtió).
Hollywood llamó a la puerta de Robert Rodríguez, y en 1995 llegaba “Desperado”, la continuación de “El Mariachi”, con mucho más presupuesto, menos imaginación y Antonio Banderas como nuevo protagonista. Es una peli divertida, pero nada más. Ese mismo año, y también con Banderas, Rodríguez dirige una de las historias de “Four Rooms”, con el botones Tim Roth enfrentándose a dos niños bastante traviesos. En este rodaje conoce a Quentin Tarantino, y se asocia con él para escribir, producir y dirigir “Abierto Hasta el Amanecer”, que se estrena el año siguiente. Mitad road-movie, mitad película gore de vampiros. Yo me lo pasé bastante bien.
En 1998 llegaba “Faculty”, un homenaje confeso a “La Invasión de los Ladrones de Cuerpos” y una película de terror adolescente de calidad superior a la media. Después empezaba el gran bache creativo de Robert Rodríguez, con la saga de “Spy Kids”. El punto culminante de esta sequía lo marcaba el estreno de “El Mexicano” (tercera parte de “El Mariachi”), una película rodada con mucha desgana. Esto sucedía en el año 2003.
El camino de Robert Rodríguez se cruzó entonces con el de Frank Miller, uno de los guionistas de cómics de mayor éxito en todo el mundo. Por sus manos han pasado personajes como DareDevil, Elektra, Lobezno o Batman (véase la crítica de “Batman Begins”). Tras una decepcionante experiencia en Hollywood como guionista (“Robocop 2” y “Robocop 3”), Miller había decidido no vender los derechos de sus obras para adaptaciones cinematográficas, y Robert Rodríguez lo sabía cuando empezó a pensar en la adaptación de “Sin City”, un cómic del que era ferviente seguidor.
Para convencer a Frank Miller, Robert Rodríguez rodó un corto con Josh Hartnett y Marley Shelton, basado en el relato “El Cliente Siempre Tiene Razón”, una de las historias cortas de “Sin City”. Después se lo mostró a Miller, diciéndole: “Si te gusta, esta será la escena de apertura de la película. Si no, tendrás un corto para enseñar a tus amigos”. Frank Miller dio el OK, el proyecto se puso en marcha inmediatamente y el resultado llega ahora a nuestras pantallas. Bueno, debo confesar que yo la vi en abril, en versión original, poco después de su estreno en los Estados Unidos. Parece mentira que hoy en día haya que esperar cuatro meses para que estrenen una película. Para mayor vergüenza de nuestras distribuidoras, al otro lado del charco ya ha salido el DVD. Luego los piratas lo ripean y lo cuelgan subtitulado en Internet. Y claro, la gente no es tonta: ¿para qué pagar los 10 ó 12 euros del pack entrada+palomitas+cocacola, si pueden descargárselo en calidad DVD y verlo gratis todas las veces que quieran? Entonces los pobres distribuidores ponen cara de virgen violada y se quejan de que les están robando. En fin…
El reparto es extensísimo: Jessica Alba, Devon Aoki, Alexis Bledel, Powers Boothe, Rosario Dawson, Benicio del Toro, Michael Clarke Duncan, Carla Gugino, Josh Hartnett, Rutger Hauer, Jaime King, Michael Madsen, Brittany Murphy, Clive Owen, Mickey Rourke, Nick Stahl, Bruce Willis, Elijah Wood. A lo largo de unas dos horas, todos ellos desfilan ante la cámara interpretando varias historias entrelazadas, saltando ágilmente de una a otra.
Aquellos de vosotros que ya conozcáis a Frank Miller sabréis que “Sin City” no es la típica historia de buenos y malos. Aquí cada uno de los personajes tiene su propia lista de pecados que purgar, haciendo honor al título. Tenemos policías (honrados y corruptos), delincuentes, políticos, mafiosos, psicópatas, mujeres de moral distraída, e incluso un cardenal totalmente desequilibrado, entre otros. Frank Miller hace un pequeño papel, interpretando a un sacerdote que tiene un desafortunado tropiezo con Mickey Rourke.
La estética es absolutamente “comiquera”, hasta el punto de que muchos fotogramas son minuciosas reproducciones de las viñetas de Frank Miller. Por esta razón, Robert Rodríguez insistió en que se acreditara a Miller como codirector. También comparte los laureles con su amigo Quentin Tarantino, que figura como director invitado especial por haber dirigido la conversación entre Clive Owen y un “perjudicado” Benicio del Toro en el interior del coche. La fotografía principal es en blanco y negro, con algún uso puntual del color y algunos planos con estilo de viñeta, en blanco y negro puros. El esmero en la recreación del cómic llega a ser casi obsesivo: en general existe bastante parecido físico entre cada actor y el personaje al que interpreta, pero se ha recurrido al maquillaje para incrementarlo aún más (atención al maquillaje prostético de Mickey Rourke, Nick Stahl y Benicio del Toro).
En los foros de Internet ya se empieza a hablar de “Sin City” como la más fiel adaptación de un cómic en la historia del cine. Lo cierto es que al final de la película nos hacemos una idea bastante exacta de cómo debe ser este sórdido lugar. Ya os aviso de que hay unas cuantas escenas bastante violentas. Imaginaos “Pulp Fiction” a lo bestia. Si os va la caña, “Sin City” es vuestra película.
Además de satisfacer al autor (un logro nada desdeñable), esta película parece haber conseguido que Frank Miller cambie por completo de opinión, ya que se prepara la adaptación de “300”, un excelente cómic, ganador de varios premios en su día, que narra la preparación y desarrollo de la batalla de las Termópilas, donde el rey Leónidas de Esparta, que contaba únicamente con trescientos soldados, se enfrentó a los miles de soldados persas comandados por el rey Jerjes. También se habla de rodar al menos dos entregas más de “Sin City”, que se rodarían conjuntamente en 2006 con el propósito de estrenarlas en 2007. Esta es la de cal. La de arena es que Robert Rodríguez ha perpetrado “Las Aventuras de Shark Boy y Lava Girl en 3D”, que se estrena una semana más tarde que “Sin City” y debe ser algo muy en la línea de la saga “Spy Kids” (la foto me produce auténtico pavor). Habrá que seguir separando el grano de la paja.
© Zineman
En 1992, un joven tejano de 24 años llamado Robert Rodríguez dirigía “El Mariachi”, una película con el “ambicioso” presupuesto de 7.000 dólares. La cinta se convirtió en un éxito rotundo, con dos millones de dólares de recaudación (vale, en términos absolutos no es gran cosa, pero en términos relativos es casi 300 veces lo que se invirtió).
Hollywood llamó a la puerta de Robert Rodríguez, y en 1995 llegaba “Desperado”, la continuación de “El Mariachi”, con mucho más presupuesto, menos imaginación y Antonio Banderas como nuevo protagonista. Es una peli divertida, pero nada más. Ese mismo año, y también con Banderas, Rodríguez dirige una de las historias de “Four Rooms”, con el botones Tim Roth enfrentándose a dos niños bastante traviesos. En este rodaje conoce a Quentin Tarantino, y se asocia con él para escribir, producir y dirigir “Abierto Hasta el Amanecer”, que se estrena el año siguiente. Mitad road-movie, mitad película gore de vampiros. Yo me lo pasé bastante bien.
En 1998 llegaba “Faculty”, un homenaje confeso a “La Invasión de los Ladrones de Cuerpos” y una película de terror adolescente de calidad superior a la media. Después empezaba el gran bache creativo de Robert Rodríguez, con la saga de “Spy Kids”. El punto culminante de esta sequía lo marcaba el estreno de “El Mexicano” (tercera parte de “El Mariachi”), una película rodada con mucha desgana. Esto sucedía en el año 2003.
El camino de Robert Rodríguez se cruzó entonces con el de Frank Miller, uno de los guionistas de cómics de mayor éxito en todo el mundo. Por sus manos han pasado personajes como DareDevil, Elektra, Lobezno o Batman (véase la crítica de “Batman Begins”). Tras una decepcionante experiencia en Hollywood como guionista (“Robocop 2” y “Robocop 3”), Miller había decidido no vender los derechos de sus obras para adaptaciones cinematográficas, y Robert Rodríguez lo sabía cuando empezó a pensar en la adaptación de “Sin City”, un cómic del que era ferviente seguidor.
Para convencer a Frank Miller, Robert Rodríguez rodó un corto con Josh Hartnett y Marley Shelton, basado en el relato “El Cliente Siempre Tiene Razón”, una de las historias cortas de “Sin City”. Después se lo mostró a Miller, diciéndole: “Si te gusta, esta será la escena de apertura de la película. Si no, tendrás un corto para enseñar a tus amigos”. Frank Miller dio el OK, el proyecto se puso en marcha inmediatamente y el resultado llega ahora a nuestras pantallas. Bueno, debo confesar que yo la vi en abril, en versión original, poco después de su estreno en los Estados Unidos. Parece mentira que hoy en día haya que esperar cuatro meses para que estrenen una película. Para mayor vergüenza de nuestras distribuidoras, al otro lado del charco ya ha salido el DVD. Luego los piratas lo ripean y lo cuelgan subtitulado en Internet. Y claro, la gente no es tonta: ¿para qué pagar los 10 ó 12 euros del pack entrada+palomitas+cocacola, si pueden descargárselo en calidad DVD y verlo gratis todas las veces que quieran? Entonces los pobres distribuidores ponen cara de virgen violada y se quejan de que les están robando. En fin…
El reparto es extensísimo: Jessica Alba, Devon Aoki, Alexis Bledel, Powers Boothe, Rosario Dawson, Benicio del Toro, Michael Clarke Duncan, Carla Gugino, Josh Hartnett, Rutger Hauer, Jaime King, Michael Madsen, Brittany Murphy, Clive Owen, Mickey Rourke, Nick Stahl, Bruce Willis, Elijah Wood. A lo largo de unas dos horas, todos ellos desfilan ante la cámara interpretando varias historias entrelazadas, saltando ágilmente de una a otra.
Aquellos de vosotros que ya conozcáis a Frank Miller sabréis que “Sin City” no es la típica historia de buenos y malos. Aquí cada uno de los personajes tiene su propia lista de pecados que purgar, haciendo honor al título. Tenemos policías (honrados y corruptos), delincuentes, políticos, mafiosos, psicópatas, mujeres de moral distraída, e incluso un cardenal totalmente desequilibrado, entre otros. Frank Miller hace un pequeño papel, interpretando a un sacerdote que tiene un desafortunado tropiezo con Mickey Rourke.
La estética es absolutamente “comiquera”, hasta el punto de que muchos fotogramas son minuciosas reproducciones de las viñetas de Frank Miller. Por esta razón, Robert Rodríguez insistió en que se acreditara a Miller como codirector. También comparte los laureles con su amigo Quentin Tarantino, que figura como director invitado especial por haber dirigido la conversación entre Clive Owen y un “perjudicado” Benicio del Toro en el interior del coche. La fotografía principal es en blanco y negro, con algún uso puntual del color y algunos planos con estilo de viñeta, en blanco y negro puros. El esmero en la recreación del cómic llega a ser casi obsesivo: en general existe bastante parecido físico entre cada actor y el personaje al que interpreta, pero se ha recurrido al maquillaje para incrementarlo aún más (atención al maquillaje prostético de Mickey Rourke, Nick Stahl y Benicio del Toro).
En los foros de Internet ya se empieza a hablar de “Sin City” como la más fiel adaptación de un cómic en la historia del cine. Lo cierto es que al final de la película nos hacemos una idea bastante exacta de cómo debe ser este sórdido lugar. Ya os aviso de que hay unas cuantas escenas bastante violentas. Imaginaos “Pulp Fiction” a lo bestia. Si os va la caña, “Sin City” es vuestra película.
Además de satisfacer al autor (un logro nada desdeñable), esta película parece haber conseguido que Frank Miller cambie por completo de opinión, ya que se prepara la adaptación de “300”, un excelente cómic, ganador de varios premios en su día, que narra la preparación y desarrollo de la batalla de las Termópilas, donde el rey Leónidas de Esparta, que contaba únicamente con trescientos soldados, se enfrentó a los miles de soldados persas comandados por el rey Jerjes. También se habla de rodar al menos dos entregas más de “Sin City”, que se rodarían conjuntamente en 2006 con el propósito de estrenarlas en 2007. Esta es la de cal. La de arena es que Robert Rodríguez ha perpetrado “Las Aventuras de Shark Boy y Lava Girl en 3D”, que se estrena una semana más tarde que “Sin City” y debe ser algo muy en la línea de la saga “Spy Kids” (la foto me produce auténtico pavor). Habrá que seguir separando el grano de la paja.
© Zineman
Etiquetas: Cine
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