[Cine] Superman Returns (El Regreso)
En el mundo de los superhéroes, Superman ha sido siempre uno de los más famosos, y desde luego es también el personaje más emblemático de la casa DC Comics, la “Distinguida Competencia” de Marvel.
La historia de Superman es de sobra conocida. Pocos instantes antes de que el planeta Krypton estalle, el científico Jor-El y su esposa Lara introducen a su hijo Kal-El en una nave de salvamento, que despega con destino a la Tierra. Al llegar, el pequeño es adoptado por los Kent, un matrimonio de granjeros, que le dan el nombre de Clark y lo crían como si de su propio hijo se tratara. Con el tiempo, Clark crece y va descubriendo sus múltiples poderes, obtenidos a partir de la energía solar: fuerza, velocidad, invulnerabilidad (sólo la kryptonita puede herirlo o matarlo), sentidos superdesarrollados, capacidad de volar, etc. Ya adulto, se muda a la ciudad de Metrópolis para trabajar como periodista en el Daily Planet, donde conoce al gran amor de su vida, Lois Lane. También presenta en sociedad a su otra faceta, Superman, que luchará contra el crimen y hará todas esas cosas que hacen los superhéroes. Y como todos ellos, tendrá un archienemigo: Lex Luthor.
Superman ha sido protagonista de varias series de televisión. La última de ellas se encuentra actualmente en antena: “Smallville”, algo así como “Dawson Crece” con una capa de “Buffy Cazavampiros”, donde el protagonista es un Clark Kent en sus años de instituto. Demasiado ñoño, aunque la serie está teniendo mucho éxito.
Pero lo que más fama ha dado a este personaje es el cine. El Superman por antonomasia es el ya fallecido Christopher Reeve, protagonista de las cuatro versiones cinematográficas que han precedido a la que aquí nos ocupa hoy. Actualmente, el traslado de personajes del cómic a la gran pantalla es algo habitual. Desde hace un tiempo, raro es el año en el que no se estrenan al menos una media docena de películas del género. Sin embargo, Superman aterrizó en el cine allá por 1978, siendo uno de los pioneros en el salto al séptimo arte, y prácticamente el primer superhéroe que tuvo éxito. Buena prueba de ello son las tres entregas que se rodaron después y la nueva película de la que hablamos hoy.
Película que ha costado Dios y ayuda estrenar, porque el proyecto “Superman V” arrancó hace unos diez años. Por aquel entonces, el título era “Superman Lives”, Tim Burton iba a ser el director, y Nicolas Cage sonaba con fuerza para el papel de Clark Kent. Después de múltiples retrasos, cambios, más retrasos y más cambios, la productora dejó la película en un coma inducido. En los últimos años, la avalancha de películas de personajes de la Marvel resucitó el género y espoleó a DC, que decidió ponerse las pilas. Como resultado de ello, en 2005 tuvimos “Batman Begins” y este año tenemos “Superman Returns”.
Como el destino es muy puñetero, la segunda tentativa heredó algunos de los contratiempos de la primera. Parte de esta historia la hemos contado ya en la crítica de “X-Men 3: La Decisión Final”. Bryan Singer dejó la saga de Marvel para dirigir el nuevo Superman, y se llevó con él a medio equipo. Curiosamente, al final fue sustituido por Brett Ratner, la primera persona que ocupó la silla de director de “Superman Returns” en esta segunda tentativa. Además de puñetero, el destino es caprichoso también.
En 2005 comenzó por fin el rodaje, cuya nota predominante fue un absoluto secretismo. Tan sólo unas pocas fotos vieron la luz, y el material que se envió a algunos festivales era francamente pobre. También hablamos de ello en la crítica de “Sospechosos Habituales”, donde comentábamos lo malo y lo bueno de la situación. Lo malo era que todo lo que se había hecho público era bastante cutre, y lo bueno era que hasta entonces habíamos visto muy poco y cabía la esperanza de que se hubieran guardado la mercancía de calidad. Básicamente, nos encomendábamos a Bryan Singer y confiábamos en su merecida reputación. Después empezaron a salir trailers que, la verdad sea dicha, tenían una pinta cada vez mejor. Y en estas estábamos el miércoles pasado, cuando “Superman Returns” llegó a los cines de toda España. El “Hombre de Acero” ha vuelto.
El nuevo Superman es un actor desconocido (escogido así adrede), Brandon Routh, que consiguió el papel citándose con Bryan Singer en una cafetería y derramando sin querer el café caliente sobre la mesa. Al principio creyó que eso le iba a costar el papel, pero el director decidió que era ideal para interpretar al despistado Clark Kent. La nueva Lois Lane es más guapa que su antecesora, Margot Kidder, pero teñir a la rubiona Kate Bosworth de morena es un pecado, y probablemente sea algo joven para el papel. El malo maloso vuelve a ser Lex Luthor, encarnado esta vez por el siempre estupendo Kevin Spacey. Para interpretar a Perry White, el editor del Daily Planet, se había contratado a Hugh Laurie, pero el éxito de la primera temporada de “House” le obligó a rodar apresuradamente una segunda, por lo que tuvo que apearse del proyecto. Y ahora diréis: “¿y le dejaron irse así como así, después del gancho que tiene el tío?”. Pues sí, porque uno de los productores de “House” es… (redoble)… Bryan Singer. Fijaos si maneja el amigo, que dentro de esa OPA hostil que le hizo a la pareja Marvel+Fox también fichó a James Marsden, el “Cíclope” de “X-Men”, para interpretar a Richard, el sobrino de Perry White. Eso sí, ello no le impidió participar en la tercera peli de la Patrulla X, aunque su papel en ella es muy reducido. Tiene pinta de ser un castigo por haberse pasado a la competencia, ¿verdad?
A diferencia de “Batman Begins”, el nuevo Superman no reinicia la saga, sino que retoma la historia un tiempo después de los sucesos de “Superman II”. Debido a una excursión a los restos de Krypton, Superman ha estado ausente de la Tierra durante cinco años, y cuando regresa descubre que las cosas han cambiado mucho. Lex Luthor ha aprovechado esta ausencia para campar a sus anchas, y Lois Lane ha decidido seguir adelante con su vida. Eso sí, el plan es el de siempre: pegarse con el villano y quedarse con la chica.
El nuevo Superman se hace largo, ya que además de durar casi dos horas y media tiene un altísimo componente de telenovela, lo que no ayuda precisamente a hacerlo más ligero. La verdad es que para contar lo que se cuenta no hacía falta extenderse tanto, y las interpretaciones son más bien discretas, incluyendo a Kevin Spacey, que ve reducido su papel en beneficio de la parte culebrón. Vamos, que falta chispa. Eso sí, los efectos especiales están muy bien. Lo mejor de la película es probablemente la escena del avión, y también la parte final.
Por supuesto, no faltan los guiños a la película de 1978. Los créditos iniciales son idénticos, con las letras dejando estela, mientras recorremos el camino entre Krypton y la Tierra, que le resultará familiar a los seguidores del Universo DC, ya que pasamos por planetas creados por esta casa de cómics. La escena final es la de siempre, con Superman volando en el espacio y sonriendo a la cámara, para después hacerse a un lado. El tema principal es el de toda la vida, compuesto por John Williams en 1978, y Brandon Routh muestra orgulloso el caracolillo capilar que tan famoso hiciera Christopher Reeve en su día.
En fin, “Superman Returns” supone para mí una pequeña decepción. Eso sí, debido a su previsible éxito de taquilla, la Warner amenaza con una secuela para dentro de tres años. Esperemos que para entonces se les pase un poco ese “efecto Smallville” que sufren ahora. De momento están ocupados con la segunda parte de “Batman Begins”, cuyo estreno está programado para 2008.
© Zineman
La historia de Superman es de sobra conocida. Pocos instantes antes de que el planeta Krypton estalle, el científico Jor-El y su esposa Lara introducen a su hijo Kal-El en una nave de salvamento, que despega con destino a la Tierra. Al llegar, el pequeño es adoptado por los Kent, un matrimonio de granjeros, que le dan el nombre de Clark y lo crían como si de su propio hijo se tratara. Con el tiempo, Clark crece y va descubriendo sus múltiples poderes, obtenidos a partir de la energía solar: fuerza, velocidad, invulnerabilidad (sólo la kryptonita puede herirlo o matarlo), sentidos superdesarrollados, capacidad de volar, etc. Ya adulto, se muda a la ciudad de Metrópolis para trabajar como periodista en el Daily Planet, donde conoce al gran amor de su vida, Lois Lane. También presenta en sociedad a su otra faceta, Superman, que luchará contra el crimen y hará todas esas cosas que hacen los superhéroes. Y como todos ellos, tendrá un archienemigo: Lex Luthor.
Superman ha sido protagonista de varias series de televisión. La última de ellas se encuentra actualmente en antena: “Smallville”, algo así como “Dawson Crece” con una capa de “Buffy Cazavampiros”, donde el protagonista es un Clark Kent en sus años de instituto. Demasiado ñoño, aunque la serie está teniendo mucho éxito.
Pero lo que más fama ha dado a este personaje es el cine. El Superman por antonomasia es el ya fallecido Christopher Reeve, protagonista de las cuatro versiones cinematográficas que han precedido a la que aquí nos ocupa hoy. Actualmente, el traslado de personajes del cómic a la gran pantalla es algo habitual. Desde hace un tiempo, raro es el año en el que no se estrenan al menos una media docena de películas del género. Sin embargo, Superman aterrizó en el cine allá por 1978, siendo uno de los pioneros en el salto al séptimo arte, y prácticamente el primer superhéroe que tuvo éxito. Buena prueba de ello son las tres entregas que se rodaron después y la nueva película de la que hablamos hoy.
Película que ha costado Dios y ayuda estrenar, porque el proyecto “Superman V” arrancó hace unos diez años. Por aquel entonces, el título era “Superman Lives”, Tim Burton iba a ser el director, y Nicolas Cage sonaba con fuerza para el papel de Clark Kent. Después de múltiples retrasos, cambios, más retrasos y más cambios, la productora dejó la película en un coma inducido. En los últimos años, la avalancha de películas de personajes de la Marvel resucitó el género y espoleó a DC, que decidió ponerse las pilas. Como resultado de ello, en 2005 tuvimos “Batman Begins” y este año tenemos “Superman Returns”.
Como el destino es muy puñetero, la segunda tentativa heredó algunos de los contratiempos de la primera. Parte de esta historia la hemos contado ya en la crítica de “X-Men 3: La Decisión Final”. Bryan Singer dejó la saga de Marvel para dirigir el nuevo Superman, y se llevó con él a medio equipo. Curiosamente, al final fue sustituido por Brett Ratner, la primera persona que ocupó la silla de director de “Superman Returns” en esta segunda tentativa. Además de puñetero, el destino es caprichoso también.
En 2005 comenzó por fin el rodaje, cuya nota predominante fue un absoluto secretismo. Tan sólo unas pocas fotos vieron la luz, y el material que se envió a algunos festivales era francamente pobre. También hablamos de ello en la crítica de “Sospechosos Habituales”, donde comentábamos lo malo y lo bueno de la situación. Lo malo era que todo lo que se había hecho público era bastante cutre, y lo bueno era que hasta entonces habíamos visto muy poco y cabía la esperanza de que se hubieran guardado la mercancía de calidad. Básicamente, nos encomendábamos a Bryan Singer y confiábamos en su merecida reputación. Después empezaron a salir trailers que, la verdad sea dicha, tenían una pinta cada vez mejor. Y en estas estábamos el miércoles pasado, cuando “Superman Returns” llegó a los cines de toda España. El “Hombre de Acero” ha vuelto.
El nuevo Superman es un actor desconocido (escogido así adrede), Brandon Routh, que consiguió el papel citándose con Bryan Singer en una cafetería y derramando sin querer el café caliente sobre la mesa. Al principio creyó que eso le iba a costar el papel, pero el director decidió que era ideal para interpretar al despistado Clark Kent. La nueva Lois Lane es más guapa que su antecesora, Margot Kidder, pero teñir a la rubiona Kate Bosworth de morena es un pecado, y probablemente sea algo joven para el papel. El malo maloso vuelve a ser Lex Luthor, encarnado esta vez por el siempre estupendo Kevin Spacey. Para interpretar a Perry White, el editor del Daily Planet, se había contratado a Hugh Laurie, pero el éxito de la primera temporada de “House” le obligó a rodar apresuradamente una segunda, por lo que tuvo que apearse del proyecto. Y ahora diréis: “¿y le dejaron irse así como así, después del gancho que tiene el tío?”. Pues sí, porque uno de los productores de “House” es… (redoble)… Bryan Singer. Fijaos si maneja el amigo, que dentro de esa OPA hostil que le hizo a la pareja Marvel+Fox también fichó a James Marsden, el “Cíclope” de “X-Men”, para interpretar a Richard, el sobrino de Perry White. Eso sí, ello no le impidió participar en la tercera peli de la Patrulla X, aunque su papel en ella es muy reducido. Tiene pinta de ser un castigo por haberse pasado a la competencia, ¿verdad?
A diferencia de “Batman Begins”, el nuevo Superman no reinicia la saga, sino que retoma la historia un tiempo después de los sucesos de “Superman II”. Debido a una excursión a los restos de Krypton, Superman ha estado ausente de la Tierra durante cinco años, y cuando regresa descubre que las cosas han cambiado mucho. Lex Luthor ha aprovechado esta ausencia para campar a sus anchas, y Lois Lane ha decidido seguir adelante con su vida. Eso sí, el plan es el de siempre: pegarse con el villano y quedarse con la chica.
El nuevo Superman se hace largo, ya que además de durar casi dos horas y media tiene un altísimo componente de telenovela, lo que no ayuda precisamente a hacerlo más ligero. La verdad es que para contar lo que se cuenta no hacía falta extenderse tanto, y las interpretaciones son más bien discretas, incluyendo a Kevin Spacey, que ve reducido su papel en beneficio de la parte culebrón. Vamos, que falta chispa. Eso sí, los efectos especiales están muy bien. Lo mejor de la película es probablemente la escena del avión, y también la parte final.
Por supuesto, no faltan los guiños a la película de 1978. Los créditos iniciales son idénticos, con las letras dejando estela, mientras recorremos el camino entre Krypton y la Tierra, que le resultará familiar a los seguidores del Universo DC, ya que pasamos por planetas creados por esta casa de cómics. La escena final es la de siempre, con Superman volando en el espacio y sonriendo a la cámara, para después hacerse a un lado. El tema principal es el de toda la vida, compuesto por John Williams en 1978, y Brandon Routh muestra orgulloso el caracolillo capilar que tan famoso hiciera Christopher Reeve en su día.
En fin, “Superman Returns” supone para mí una pequeña decepción. Eso sí, debido a su previsible éxito de taquilla, la Warner amenaza con una secuela para dentro de tres años. Esperemos que para entonces se les pase un poco ese “efecto Smallville” que sufren ahora. De momento están ocupados con la segunda parte de “Batman Begins”, cuyo estreno está programado para 2008.
© Zineman
Etiquetas: Cine
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