[Cine] Las Crónicas de Spiderwick
En 2006 nos tomamos un año sabático, ya que la gran apuesta del género, “El Laberinto del Fauno”, era un guión original del propio director, Guillermo del Toro (me niego a contar “Eragon”, ya que es un puñetero plagio de “La Guerra de las Galaxias”). Sin embargo, no dejó de ser una pausa para coger fuerzas, ya que en 2007 llegaron “Harry Potter y la Orden del Fénix”, “Los Seis Signos de la Luz”, “La Brújula Dorada”, “Beowulf” y “Stardust”. Acabamos de empezar 2008, año en el que se estrenarán “Harry Potter y el Príncipe Mestizo” (sexta parte ya de la saga) y “Las Crónicas de Narnia – El Príncipe Caspian” (segunda entrega).
La cosa suma y sigue, ya que los señores de la Warner acaban de marcarse una jugada a lo “Kill Bill”, y acaban de anunciar que la adaptación “Harry Potter y las Reliquias de la Muerte”, séptima y (por fin) última parte de la saga, cuyo estreno estaba previsto para finales de 2010, se dividirá en dos películas, a estrenar en otoño de 2010 y primavera de 2011 respectivamente (aviso a los navegantes: el libro no da para tanto).


Mientras tanto, un nuevo jugador entra en la partida: “Las Crónicas de Spiderwick”, basada en los libros de Holly Black, ilustrados por Tony Diterlizzi. Esta serie se compone de cinco títulos: “El Libro Fantástico”, “El Anteojo Asombroso”, “El Mapa Perdido”, “El Árbol Metálico” y “El Ogro Malvado”, todos ellos publicados en castellano. Existen algunas entregas más, enmarcadas en las colecciones “Más Allá de ‘Las Crónicas de Spiderwick’” y “Libros de Acompañamiento”, que de momento no cuentan con edición española. La película que ahora nos llega está basada en los cinco libros principales.
Arthur Spiderwick es un estudioso de todo lo que le rodea. Gracias a su inusitada curiosidad, ha descubierto que hay un mundo fantástico invisible a nuestros ojos, habitado por criaturas mágicas como duendes, trasgos, hadas y un largo etcétera. Algunos de ellos son gente de buen corazón, y Spiderwick consigue ganarse su amistad y confianza, pero otros son malvados y sólo viven para la conquista y la destrucción. Estos últimos, liderados por el ogro Mulgarath, están intentando hacerse por todos los medios con el diario de Spiderwick, en el que éste ha ido recopilando todos sus conocimientos sobre criaturas mágicas. Si el libro, con todos sus secretos, cae en manos de Mulgarath, todo estará perdido, así que Spiderwick protege su hogar con un círculo mágico, dejando el libro en el interior de la casa.

Ochenta años más tarde, la vieja casa abandonada se convierte en el nuevo hogar de los sobrinos-bisnietos de Spiderwick, que se acaban de mudar con su recién divorciada madre (pues sí, empezamos con tópicos). Mientras la hija mayor, Mallory, se concentra sus entrenamientos de esgrima, el pequeño Jared, el más cercano a su padre, se encierra en sí mismo (más tópicos) y se dedica a explorar la casa, desoyendo los consejos de su hermano gemelo Simon. De este modo, Jared encontrará el estudio de su tío-bisabuelo y, lo que es peor, su diario de campo, poniendo en peligro todo aquello que Spiderwick intentaba proteger.
El reparto está encabezado por Freddie Highmore (el niño de “Descubriendo Nunca Jamás” y “Charlie y la Fábrica de Chocolate”), en el doble papel de Jared y Simon. Le acompañan Sarah Bolger y Mary-Louise Parker, como hermana y madre. David Strathairn (el Edward R. Murrow de “Buenas Noches, y Buena Suerte”) es Arthur Spiderwick, y Joan Plowright interpreta a la versión anciana de su hija Lucinda. Nick Nolte tiene un papelito como forma humana de Mulgarath. Conociéndole, no habrá necesitado maquillaje sino irse de juerga la noche antes, aunque esta vez sin que le pille la policía, no sea que no le dejen salir del calabozo para ir a rodar. Dirige Mark Waters, supuesto especialista en cine infantil.

“Las Crónicas de Spiderwick” es una película de fantasía bastante justita, con un guión muy sencillo repleto de tópicos y un despliegue de efectos especiales acorde con la historia, aunque en su defensa he de decir que apenas tiene pretensiones, y sin ser ninguna maravilla puede resultar lo suficientemente entretenida para el público infantil. De cualquier modo, es una nueva muestra del cine que estamos viendo los últimos meses, con una oferta muy escasa en la que predominan las películas de baja calidad.
El horizonte que tenemos ante nosotros no invita al optimismo. El otro día me preguntaban por los próximos estrenos, y no veo nada mínimamente interesante antes de la cuarta parte de Indiana Jones, que llegará a los cines el 22 de mayo y que, la verdad sea dicha, despierta en mí más esperanza que confianza. Por cierto, que nadie piense que todo esto se debe a la famosa huelga de guionistas. Para mí, llevan en huelga oficiosa varios años.
© Zineman
Etiquetas: Cine
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, escribe tu nombre para facilitar el seguimiento de este hilo de comentarios. JeSúS Club
<< Volver a la página principal